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EL LENGUAJE DE LA PAZ Y LA ESPERANZA octubre 10, 2024

“La humanidad debe recordar que la paz … es el regalo que nos damos los unos a los otros” (Elie Weisel, Premio Nobel de la Paz).

Hoy, los invito a reflexionar sobre cómo podemos construir la paz en nuestra comunidad reggiana. A través de acciones, ya sean grandes o pequeñas, tenemos la oportunidad de regalarnos paz y mantenernos unidos y fuertes, a pesar de los desafíos que enfrentamos en la actualidad.

En la filosofía de Vía Reggio, el diálogo es esencial para construir la paz, al igual que el respeto por los ritmos y tiempos de cada persona. Este enfoque se refleja en las conversaciones que tenemos en nuestra escuela y en nuestras familias, creando oportunidades valiosas para que nuestros niños, niñas y adolescentes, junto a los adultos, despierten su sentido de conciencia. De esta manera, desarrollarán un lenguaje de esperanza y comenzarán a visualizar el mundo que desean construir.

Es fundamental acompañar las inquietudes que tienen nuestros hijos e hijas, sobre la realidad que vivimos, respondiendo de manera adecuada a su edad, siempre desde una perspectiva que les ayude a desarrollar el lenguaje de la esperanza y la paz. Para ello, podemos comenzar con reflexiones que les permitan soñar con el mundo que quieren:

  • El cuidado de nuestra comunidad: Reflexionemos juntos: ¿Quiénes forman parte de nuestra comunidad? ¿A quiénes y cómo podemos cuidar? ¿Cómo se vive la paz en la escuela, en casa y en nuestro entorno?
  • El conflicto y la no violencia: Es vital entender que conflicto y violencia no son sinónimos. Aprender a transformar tensiones en oportunidades de diálogo es clave. Como dicen los alumnos de 2° de secundaria de Vía Reggio en su clase de Resolución de Conflictos: “Un conflicto es una oportunidad para solucionar; la violencia nunca es la solución, porque todos perdemos”.
  • La empatía y la adaptación: Pensemos en nuevas formas de relacionarnos, en ser flexibles y en no paralizarnos ante el miedo. Al mismo tiempo, debemos tener paciencia con los procesos de cambio y adaptación de cada individuo en nuestra comunidad. Preguntémonos: ¿Cómo podemos apoyarnos mutuamente durante este proceso? ¿Cómo puedo ayudar a un amigo que vive lejos de mí y mantener unidos nuestros lazos de amistad?

La paz es una construcción diaria que requiere esfuerzo colectivo. Fomentando un diálogo empático, podemos avanzar hacia un futuro más esperanzador.

“Debemos desarrollar nuestra capacidad de cuidar, pensando en términos de comunidad. Ser constructores de paz significa cuidarnos mutuamente.” – Sassoli, D. (Presidente del Parlamento Europeo 2019 – 2022).